Como es de público conocimiento, en el día de ayer se promovió la interpelación de los ministros oficialistas: Roberto Kreimerman (Industria), Héctor Lescano (Turismo) y Graciela Muslera (Medio Ambiente) a raíz de la instalación de la minera Aratirí. La iniciativa parlamentaria es del diputado Lacalle Pou, perteneciente al sector derechista del Partido Nacional.
Los legisladores frenteamplistas se opusieron a que sean llamados a sala los ministros para brindar mayores informaciones sobre el proyecto Aratirí. El gobierno viene manejando este asunto con total hermetismo. Cualquier oposición o cuestionamiento ciudadano al proyecto, pondría en tela de juicio si el proyecto de minería a cielo abierto le sirve al país o no, cuales son los costos sociales y ambientales a pagar.
En el artículo “Privatización de las dunas del Cabo Polonio” (1/06/11) de este blog se leía: “¿A dónde está situada la izquierda progresista hoy, sino a la derecha de los partidos tradicionales? Pues bien, tanto los legisladores del Partido Colorado, como los del Partidos Nacional estuvieron de acuerdo en que los ministros mencionados deban aportar mayores informaciones. El razonamiento lógico es: si los propios legisladores no poseen información, ¿cuál es la información que posee el uruguayo de a pie? La respuesta es obvia.
PARA MUESTRA ALCANZA UN BOTÓN
El diputado nacionalista Lacalle Pou manifestó: "Personalmente soy contrario a esta inversión, creo que el capital no siempre es sinónimo de prosperidad. Aquí está en juego la salud ambiental y humana. Es una producción excluyente que atenta contra el turismo".
"Hay incertidumbre sobre una inversión supuestamente millonaria que va a afectar nuestro territorio. Si bien hay una bonanza económica, no tenemos por qué aceptar cualquier inversión. Falta información oficial"
¿Esto lo dice un ecologista, un productor ganadero, un actor turístico de la zona; que vería como su negocio se va al diablo en poco tiempo? No. Quien lo dice, es un integrante del partido político que impulsó el modelo forestal en Uruguay. Luego vinieron las pasteras que todos conocemos.
Así están las cosas en el guay contemporáneo; cuando los Partidos que nos representan están en la oposición todos están del lado del pueblo, del interés común; todo tiene un barniz “de izquierda”, luego cuando trepan al gobierno mintiéndole a la gente, los mismos que estaban del lado del pueblo se vuelven conservadores, herméticos, manejan las grandes decisiones entre cuatro paredes y de espaldas al pueblo. Y se podría decir que hasta contra los intereses del pueblo; léase: extranjerización de la tierra, expulsión de los pequeños productores hacia la ciudad o asentamientos precarios, monocultivos, minería a cielo abierto, especulación financiera, monopolios de empresas extranjeras en determinados sectores de la producción, etc.
Este fenómeno ambivalente que se da en Uruguay también se da en otras partes del mundo. El fenómeno de masas en España protestando contra el Sistema y el reciente revés político de Berlusconi en Italia, son un ejemplo de que el sistema capitalista y su modelo de democracia representativa no funcionan como debería, o al menos no engaña a tanta gente como lo hacía antes. El teólogo brasilero Leonardo Boff escribía: “Cada cuatro o cinco años, los ciudadanos tienen la posibilidad de escoger a su dictador que, una vez elegido, se dedica más a hacer una política palaciega que a establecer una relación orgánica con las fuerzas sociales”
¿El fin justifica los medios? Parece que para los dirigentes partidarios la meta es llegar al gobierno, no importa el cómo, ni a costa de qué. No importan los programas de gobierno (si los hay), que haya que mentirle a la gente o venderle el rico patrimonio al extranjero. Lo importante es llegar. Desde allí se podrán beneficiar de las Aratirís, de las UPM, de las concesiones de públicos con privados, de los puertos de aguas profundas, aeropuertos, etc. Montañas de dólares al alcance de las manos del los vivos de siempre, el oro y el moro, el poder y la corrupción.
SE LE VEN LAS PATAS A LA SOTA
En febrero de este año viajaron a la India el vicepresidente Danilo Astori y el ministro de Industria Roberto Kreimerman, encabezando una misión comercial compuesta por medio centenar de personas. Entre las empresas indias que la delegación visitó estaba Zamin Ferrous, que en Uruguay tiene el proyecto minero de extracción de hierro, Aratirí.
El hierro que esta empresa pretende extraer tiene como principal destino de exportación el mercado Chino, pero para eso también necesita de un puerto de aguas profundas, para que puedan entrar y salir buques de gran calado. Sin el puerto, el proyecto no es posible.
¿Necesitamos un puerto? Viaje relámpago del presidente Mujica a España de la mano del empresario Paco Casal. Gente del Real Madrid pondría la plata y también capitales israelíes. Se haría un gran puerto privado en régimen de Zona Franca.
Consultado por lo del puerto, el presidente Mujica dijo: “están avanzadas las negociaciones. Hay tres propuestas, y hay que tratar de juntarlas", aunque aclaró que "no hay espacio en La Paloma para un emprendimiento de esta magnitud”. Claro, los turistas no podrían disfrutar junto a los grandes barcos entrando y saliendo.
El día de 8 de este mes, llega al Uruguay el vicepresidente de China, Xi Jinping. “"Estoy convencido de que la visita puede lograr la misión de expandir el consenso, incrementar la amistad y profundizar la cooperación para el desarrollo común", dijo Xi Jinping, y también están interesados en lo del puerto. Necesitamos el hierro que ustedes nos van a regalar.
Para el gobierno no sería “patriótico” andar ventilando mucho todo este asunto, pero ¿cómo puede pasar desapercibido algo tan grande?
A pesar de que parece que todo está decidido con mucho tiempo de antelación, tenemos por delante:
1 - Nuevo Código Minero para terminar de aprobarse. El canon para el Estado sólo sería del 5%. La empresa tiene la intención de exportar 18 millones de toneladas anuales de hierro a China.
2 - 120 mil hectáreas de tierras afectadas, aunque mayoritariamente iban a estar destinadas a actividades de prospección y exploración. En cuanto a la extracción minera, el proyecto dedicaría unas 11.500 hectáreas, superficie que comprenden 209 padrones que serán parcial o totalmente intervenidos. El proyecto de Aratirí incluye además un segundo componente industrial llamado "mineroducto" que afectaría a los departamento de Durazno, Florida, Treinta y Tres, Lavalleja y Rocha, ocupando unas 1.100 hectáreas.
3 - Privatización del agua que emplearia el mineroducto. Millones de litros por día.
4 - Construcción del puerto de aguas profundas en Rocha en régimen de Zona Franca.
5 - Interpelación parlamentaria para mayores informaciones.
El aire se está poniendo denso e irrespirable pero no es por las cenizas del volcán.
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